Charlton Heston. In Memoriam: Reflexiones sobre "Cuando el destino nos alcance" (Soylent Green, 1973)
Charlton Heston fue uno de los grandes actores de Hollywood, un ícono que dejó una huella profunda en el cine de ciencia ficción y otros géneros. Entre sus películas más memorables, "Cuando el destino nos alcance" (o "Soylent Green", como es su título original), dirigida por Richard Fleischer en 1973, ha sido un film que no solo he admirado desde hace más de 40 años, sino que sigue resonando en mí hoy en día, especialmente en estos tiempos tan inciertos.
El contexto y la premisa del film
"Cuando el destino nos alcance" se sitúa en un futuro distópico, específicamente en el año 2022 (¡casi el presente!), en una Nueva York abarrotada con 40 millones de habitantes. La película presenta un mundo devastado por la sobreexplotación de los recursos naturales, donde la población depende de un misterioso alimento conocido como Soylent, hecho a base de algas marinas. Sin embargo, este suministro no es suficiente para alimentar a todos, y la humanidad está al borde de la hambruna.
Es entonces cuando la Compañía Soylent introduce un nuevo producto revolucionario: Soylent Green, mucho más nutritivo y completo que sus predecesores. Lo que nadie sospecha es el oscuro secreto detrás de su composición.
Este futuro no parece tan lejano si se considera el escenario global actual, donde los recursos se agotan y las desigualdades sociales siguen aumentando. Justo por eso, esta película me ha perseguido en estos últimos años, especialmente durante la pandemia.
Un reparto y dirección excepcionales
Uno de los aspectos más sobresalientes de "Soylent Green" es su reparto, liderado por el inigualable Charlton Heston como Thorn, un detective que se enfrenta a una verdad aterradora. Heston, quien también es conocido por su participación en otras obras maestras de la ciencia ficción como "El planeta de los simios" (1968), vuelve a dar una actuación impactante en esta película.
El elenco también incluye a Leigh Taylor-Young, Joseph Cotten y, en uno de los roles más memorables, Edward G. Robinson, quien interpreta a Sol Roth, un anciano que decide terminar su vida tras descubrir la verdad detrás de Soylent Green. La escena en la que Sol elige morir, viendo imágenes idílicas de un planeta que ya no existe, es una de las más conmovedoras de la historia del cine. La combinación de música clásica con esas imágenes de la naturaleza perdida mientras Sol se despide de la vida me dejó profundamente marcado.
Las lecciones de "Soylent Green"
La película aborda varios temas inquietantes que invitan a la reflexión. La decadencia social y la lucha de clases se ilustran de manera brillante mediante la imagen de una ciudad dividida: por un lado, los pobres sobreviven en condiciones miserables, mientras que los ricos disfrutan de lujos inalcanzables. La película no solo nos presenta un futuro desolador, sino también un espejo de las desigualdades que ya existían en los años 70 y que, en muchos casos, se han agravado hoy.
Otro de los aspectos que me parece más perturbador es la cosificación de las mujeres, que en este futuro distópico son vistas como parte del mobiliario de los apartamentos de lujo. Este trato despiadado de los seres humanos como mercancía refleja el grado de deshumanización al que la sociedad ha llegado.
El enfoque que Fleischer da a esta visión sombría del futuro no solo es brillante, sino también descorazonador. Las imágenes de la represión de manifestantes, literalmente recogidos con palas y arrojados a camiones como ganado, son poderosas y perturbadoras. La película está llena de momentos impactantes que todavía reverberan con fuerza en mi memoria, especialmente cuando pienso en los desafíos actuales de nuestra sociedad.
Vigencia en tiempos de pandemia
A lo largo del confinamiento durante la pandemia, volví a revisar este clásico. Y no pude evitar pensar en lo relevante que sigue siendo. La película se sitúa en el 2022, y aunque los detalles de esa distopía no se han materializado de la misma forma, los paralelismos son evidentes: el impacto humano sobre el planeta, las crisis alimentarias, las pandemias y las desigualdades sociales son problemas que enfrentamos hoy en día.
La imagen de un planeta devastado y agotado se siente más real que nunca. Además, la pandemia nos recordó lo frágil que es nuestro sistema, y cómo nuestras acciones de hoy pueden tener consecuencias devastadoras para el mañana.
Escenas inolvidables
De todas las escenas que "Soylent Green" nos ofrece, hay algunas que han dejado una marca profunda. La cena entre Thorn y Sol Roth, en la que disfrutan de auténtica comida mientras escuchan música clásica, es una de esas escenas llenas de nostalgia y melancolía. En un mundo donde la comida de verdad es un lujo impensable, ese momento se siente como una despedida a una era perdida.
Pero, sin duda, el momento más inolvidable es el suicidio de Sol Roth. Su muerte, acompañada de esas imágenes idílicas del pasado, es devastadora y, al mismo tiempo, poética. La revelación que hace a Thorn antes de morir marca el giro final de la película, cuando se desvela el terrible secreto del Soylent Green.
FAQ
1. ¿Qué hace tan relevante a "Soylent Green" hoy en día?
El film trata temas como la sobreexplotación de los recursos naturales, las desigualdades sociales y el control corporativo sobre la alimentación. Estos problemas, aunque exagerados en la película, resuenan con las preocupaciones actuales sobre el cambio climático y las crisis globales.
2. ¿Cómo se compara "Soylent Green" con otros clásicos de la ciencia ficción?
En mi opinión, "Soylent Green" es un clásico único por su tono sombrío y sus imágenes poderosas. Se coloca junto a otros grandes del género como "El planeta de los simios" (también con Heston) y "2001: Una odisea del espacio" por su capacidad de hacer reflexionar sobre el futuro de la humanidad.
3. ¿Por qué es memorable la actuación de Edward G. Robinson?
Robinson da vida a Sol Roth, y su escena de muerte es uno de los momentos más conmovedores del cine. Fue su último papel antes de fallecer, lo que hace su actuación aún más emotiva y poderosa.
Conclusión
"Cualquiera que vea "Soylent Green" en el contexto actual no podrá evitar sentir un escalofrío. Aunque la película tiene más de 50 años, su mensaje sobre los peligros de la sobreexplotación de recursos y la deshumanización sigue siendo muy vigente. Un clásico de la ciencia ficción que, como muchos otros, nos advierte sobre el camino que podríamos estar tomando.
Charlton Heston nos dejó en 2008, pero su legado en el cine sigue vivo, especialmente a través de películas como esta, que nos invitan a reflexionar sobre nuestro futuro y las decisiones que tomamos como humanidad.
A Charlton Heston, In Memoriam. 4/10/1923 - 5/4/2008.
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